La gran mayoría no conocía las rúbricas o matrices de evaluación. El aprendizaje fue rápido (aunque intenso). Todo el mundo acabó con la entrada en el blog que se pretendía. Lo que no tengo tan claro es la reflexión profunda sobre el uso de esta herramienta en situciones reales. En las conversaciones "personales" grupo a grupo aparecían siempre los mismos temores, la dificultad de apreciar matices, de mantenerse objetivo en las apreciaciones, la generación de una "nota" final de la que quedarse satisfecho. Son dudas más que razonables. Otros métodos de evaluación los tenemos mucho más interiorizados, al menos como "sufridores", y nos parecen mucho más "naturales" por eso. Espero que el contacto con esta nueva posibilidad (mucho más adecuada para actividades) sirva, cuando menos, de semilla para la reflexión y el eventual cambio en los procesos de evaluación.
En cuanto a metodología nada nuevo. Si acaso, que queda claro que en 2 horas y con este número de personas y topología del aula es imposible lo de la "discusión de grupo"
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